¿Qué es la Masonería?

La Francmasonería tiene como propósito fundamental el bien de la individuo, así como del colectivo. A través de sus símbolos y alegorías, el Masón encuentra una guía para cumplir con esta misión, fortaleciendo su carácter mediante la superación de sus pasiones y deseos, y cultivando sus virtudes. La orden sostiene que el progreso del conjunto depende del crecimiento del individuo, bajo la máxima: “Uno para todos y todos para uno.”

La Masonería es una escuela iniciática, lo que significa que todos sus miembros han pasado por un antiguo ritual de ingreso conocido como iniciación. En su esencia, retoma enseñanzas y elementos de los misterios egipcios, persas, hebreos, griegos e hindúes. Se reconoce que la magia es real, y por ello el Masón es visto como un mago y un sabio.

El sendero masónico no es sencillo. El iniciado debe enfrentarse de manera constante a sus propios vicios y pasiones para alcanzar la luz interior. Su tarea es romper el ciclo kármico que lo ata y convertirse en maestro de las leyes naturales, con el fin de transformar su realidad. Este camino exige un talento, una disposición y una virtud que no cualquiera está dispuesto a sostener.

Contrário a lo que muchos profanos imaginan, la Masonería no es una bolsa de trabajo ni un medio para acceder a la política o a cargos de poder. Quien ingresa con tales expectativas pronto descubre que se equivoca y termina por alejarse, pues esta fraternidad milenaria exige algo más profundo: la búsqueda sincera de la verdad y la perfección del ser.